La Real ha vuelto esta mañana al trabajo en Zubieta en una sesión a puerta abierta en la que numerosos aficionados han arropado al equipo antes de la cita del miércoles en Anduva. La ilusión por poder pasar a la final es enorme y la marcha liguera del equipo no hace más que alimentar esa preciosa posibilidad de volver a una final 32 años después.