Hace una década un arquitecto donostiarra, realista de cuna afincado en Barcelona, comenzó a labrarse un nombre en el entorno de la Real gracias, sobre todo, a su hobby. En sus pocos ratos libres Mikel Soro no dejó aparcada su otra pasión, el dibujo. Y así nació Marrazketabar, su seudónimo, cuya historia hasta hoy la hemos disfrutado a través de sus obras de arte.
Con motivo de Korner Kultura & Futbol Festibala, organizado por Real Sociedad Fundazioa, hace un mes se inauguró la exposición ‘Marrazketabar: marrazkien indarra’, que sigue en marcha hasta el 26 de agosto en el Centro de Cultura Ernest Lluch, en el Reale Arena.
Por razones laborales, ‘Marrazketabar’ no había podido visitarla hasta el jueves pasado y lo hizo acompañado por su gran creación: Txurdin. Le brillan los ojos cada vez que ve a nuestra querida mascota. Y este momento tan especial merecía una charla que aquí te dejamos.
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