"Mi sueño no era ser futbolista, era ser jugador de la Real"

Xabi Prieto colgará las botas a final de temporada. Una decisión comunicada en el día de ayer y que hoy ha tenido la puesta en escena del anuncio con un acto en el que el capitán, rodeado del Presidente, Consejo, cuerpo técnico y compañeros del primer equipo, ha explicado, por momentos sin contener la emoción, los motivos por los que dirá adiós tras una de las carreras deportivas más brillantes que se pueda imaginar.

Jokin Aperribay ha dado comienzo al acto dedicándole unas palabras a Xabi. “Eres lo que queremos que sea un jugador de la cantera. Has llevado la bandera de la Real. Con el tiempo se recordará mucho más todavía lo que son jugadores como tú. Eres un ejemplo, lo has sido durante 15 años y lo serás dentro de la Real en el futuro. Gracias por todo lo que nos has dado”.

Después, turno para la Leyenda. Xabi ha subido al estrado para dirigirse a todos los asistentes y trasladar su mensaje a toda la afición. “Es un día alegre. He disfrutado durante 15 años de esta profesión en el equipo que siempre he soñado jugar, soy un privilegiado. Es día de dar las gracias. A Jokin, a los consejeros, a Roberto, a Loren, a Eusebio, a Imanol, a mis compañeros, a mi familia, a mi hermano, a mi mujer, a mis hijos y a la afición. Seguro que no es la afición más ruidosa, pero si la más fiel como es la nuestra, la defenderé a muerte y siempre la llevaré en el corazón”. Ése ha sido el mensaje inicial del capitán.

Xabi ha explicado cómo ha tomado la decisión. “Cuando renové el año pasado tenía claro que ésta iba a ser la última temporada. Hasta hace pocas semanas no se lo comuniqué al Presidente por si me arrepentía. Creo que es la decisión correcta. Siento que es el momento de dar el paso a gente joven y ayudar desde fuera, desde mi asiento de socio o desde donde sea. Sé que lo voy a echar muchísimo de menos, pero me lo tomo de manera natural. Creo que es la mejor decisión que podía tomar”, ha señalado.

Admirado por todos, Xabi representa el amor a unos colores, los valores que todo canterano debe tener, la categoría dentro y fuera del terreno de juego. Impermeable a cualquier canto de sirena con más ceros, Xabi ha recalcado que “cuando te sientes querido y valorado con tu gente no necesitas más. He crecido con los valores del Club. Mi sueño no era ser futbolista, era ser jugador de la Real”, ha sentenciado.

Con 530 partidos a sus espaldas, Xabi confía en poder recuperarse de la lesión y sumar algún encuentro más a esa preciosa cifra. Y despedirse sobre el césped delante de toda la afición. “Es bonito llegar a esos números. Todos los entrenadores que he tenido han confiado en mí, me han respetado las lesiones… Es el momento de poner punto y final a esta magnífica etapa”, ha concluido Xabi.